Un Abdomen Firme y Joven: Lipectomía y Lipoescultura
Lograr un abdomen de «nadadora» es posible gracias a una cirugía plástica que ha venido cobrando gran fuerza entre las mujeres: la lipectomía. También conocida como abdominoplastia, este procedimiento es ideal para acompañar a una lipólisis láser o para pacientes que han tenido una pérdida considerable de peso y presentan piel sobrante que no se retrae naturalmente.
¿Por qué considerar una lipectomia?
Con el paso del tiempo, es común que el cuerpo pierda sus formas y cambie drásticamente. Factores como la edad, los embarazos, las cesáreas o la obesidad pueden dejar secuelas difíciles de revertir con solo ejercicio. Muchas pacientes presentan abdómenes abultados, caídos, flácidos o con presencia de celulitis y estrías.
Estas condiciones suelen afectar la autoestima al verse al espejo, llegando incluso a impactar la vida en pareja y la intimidad. En estos casos, la lipectomia ofrece una solución integral con resultados asombrosos. Al combinarse con la lipólisis láser (para eliminar grasa y moldear), la lipectomia se encarga de eliminar el exceso de piel, y de paso, borra gran parte de las estrías y cicatrices previas de cesárea.
El procedimiento y la cicatrización
Durante una lipectomía, y dependiendo de la cantidad de piel que se deba cortar, es posible que el cirujano necesite reconstruir el ombligo para darle una apariencia natural.
Es importante destacar que este procedimiento también se utiliza para corregir el exceso de piel tras casos de obesidad mórbida, por lo que no siempre requiere ir acompañado de una extracción de grasa. Aunque la cirugía deja una cicatriz en la parte inferior del abdomen, su tamaño variará según la cantidad de tejido a resecar. Sin embargo, esta incisión se planea estratégicamente para que pueda ocultarse fácilmente bajo la ropa interior o el traje de baño.
Galería de Casos de Éxito: Transformaciones con Lipectomia
Preguntas frecuentes sobre la abdominoplastia o lipectomía
La lipectomia, o abdominoplastia, es una cirugía diseñada para eliminar el exceso de piel y grasa del abdomen, además de tensar los músculos de la pared abdominal. Es ideal para pacientes que tienen flacidez severa tras embarazos o pérdidas significativas de peso.
Sí, la lipectomia elimina las estrías que se encuentran en la porción de piel que se va a recortar, generalmente las ubicadas debajo del ombligo. Las estrías restantes pueden mejorar su apariencia al estirarse la piel, pero no desaparecen por completo si están fuera del área de resección.
La cirugía deja una cicatriz transversal en la parte baja del abdomen, justo encima del pubis. Aunque es permanente, está diseñada para quedar oculta bajo la ropa interior o el traje de baño. Su longitud depende de la cantidad de piel que sea necesario retirar.
La lipólisis láser se enfoca en derretir y extraer grasa acumulada para moldear, mientras que la lipectomia se centra en recortar la piel sobrante que no se retrae. A menudo, ambos procedimientos se realizan juntos para obtener un abdomen plano y firme.
